Materiales:
- cinta de seda verde oscuro o café para el tallo (la más delgada que encuentres, si lo deseas también puedes usar hilo para bordar).
- cinta rosa, roja, violeta u otro color que sea de tu agrado, sin embargo lo mejor es usar un color cálido (como los anteriores y sus variaciones) o pastel, que será para la flor (ya sea del mismo grosor del tallo o un poco más gruesa).
- cinta amarilla para el centro y unos avalorios pequeños amarillos (opcional).
Empecemos:
1) Consigue un patrón (el que desees, el que usaremos en este mantelito lo pondré al final y es gratuito), consigue la tela en la que quieras hacer el bordado.
2) Cuando tengas el patrón cálcalo sobre la tela, en mi caso la tela que usé es lo suficientemente transparente como para calcarlo directamente, si tu tela no te permite ya sea por el tono o por el grosor no te estreses, usa papel carbón (de ese que se usaba antes para hacer las copias en las máquinas de escribir), si no consigues, puedes usar para calcar.
Empezaremos a bordar con las cintas, primero haremos el tallo, nos centraremos él en este post.
1) Enebra la aguja y métela por la parte posterior de la tela, empieza de la flor central hacia afuera; ahora tienes dos opciones: le haces un nudo al final a la cinta o la dejas sin nudo y luego le haces unas pequeñas puntadas (así lo hice yo, mira la segunda foto). Vamos a utilizar la puntada recta que vimos en el post anterior.
2) Hazlo lentamente, tomate tu tiempo, si hay una unión en los tallos, puedes sacar la aguja por el mismo agujero y luego seguir el nuevo tallo, si hay un tallo lejos del otro puedes cortar la cinta y empezar por el otro lado.
3) Sigue con tranquilidad, cuando te acostumbres a hacer la puntada será más fácil. Cuando termines los tallos de un lado, corta la cinta y hazle unas puntadas, luego inicia el tallo del lado opuesto a la flor.
4) Al final te quedará algo así:
El tiempo depende de cada persona, yo duré como una hora (tomando fotos y todo), la próxima vez haremos las flores y el centro.
Nos vemos, ¡practiquen!